Por qué se le pone dinero a San Judas Tadeo
Por qué se le pone dinero a San Judas Tadeo es una pregunta frecuente entre sus devotos, ya es una práctica popular en muchas culturas, especialmente en países de tradición católica. Muchos seguidores de San Juditas ponen dinero en su altar por varias razones.
- Agradecimiento: Muchas personas lo hacen como una forma de agradecimiento por haber recibido favores o milagros. Dejar dinero es una manera simbólica de reconocer la intervención divina.
- Promesas o mandas: En algunos casos, las personas prometen una ofrenda monetaria al santo a cambio de su ayuda en alguna petición específica. Si la petición se concede, se cumple la promesa como una forma de respeto y devoción.
- Peticiones: Algunos creyentes colocan dinero como parte de una súplica o petición, con la esperanza de que su contribución sea un sacrificio que ayude a que el santo interceda por ellos.
- Tradición: Muchas veces, es una cuestión de tradición familiar o cultural, donde las personas siguen los ejemplos de generaciones anteriores que han colocado ofrendas monetarias como una señal de devoción.
¿Cuántas monedas se le pone a San Judas Tadeo?
No hay un número específico de monedas que se deba colocar, ya que esta práctica varía según las creencias y costumbres de cada persona o comunidad.
Algunas personas optan por colocar una sola moneda como símbolo de una petición o agradecimiento, mientras que otras pueden ofrecer tres, siete, o hasta trece monedas, porque estos números tienen significados simbólicos en diferentes tradiciones religiosas y espirituales.
Sin embargo, muchos aseguran que esta práctica es una interpretación errónea, posiblemente derivada de una confusión con Judas Iscariote, quien traicionó a Jesús por treinta monedas de plata.
El significado de la moneda de San Judas
Una fuente de confusión es el medallón que San Judas Tadeo porta en su pecho, el cual a menudo se malinterpreta como una moneda. Este medallón no tiene ninguna relación con dinero, sino que se refiere a la Imagen de Edesa.
Esta imagen representa un paño en el cual se habría plasmado el rostro de Jesús después de limpiarse durante su pasión, y se cree que San Judas Tadeo la llevó consigo durante su misión evangelizadora.
Este símbolo, entonces, no está relacionado con la traición de Judas Iscariote, sino que es un distintivo de su cercanía con Jesús y de su dedicación a la difusión del Evangelio.
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¿Qué es la imagen de Edesa?
La Imagen de Edesa, también conocida como el Mandylion, es una reliquia cristiana que contiene la imagen milagrosa del rostro de Jesús y según la tradición, fue impresa en un trozo de tela cuando Cristo se limpió el rostro durante su camino al Calvario.
Esta imagen fue llevada por el apóstol a Edesa, en la actual Turquía, donde fue venerada como una prueba de la divinidad de Jesús. El medallón es una referencia a esta reliquia, lo que lo distingue de otros santos y refuerza su cercanía con Cristo el Salvador.
28 de octubre, día del santo patrono
Cada 28 de octubre, los devotos de Juditas celebran su día, una jornada dedicada a honrarlo como el patrono de las causas difíciles y desesperada.
Durante esta celebración, miles de personas acuden a altares e iglesias dedicadas a su nombre, como el emblemático Templo de San Hipólito en la Ciudad de México, para agradecer favores recibidos o solicitar su intervención en momentos críticos.
Aunque no es obligatorio ofrecer dinero a San Judas Tadeo, muchos creyentes participan en diversos rituales
- Encender velas blancas, verdes y doradas: Simbolizan la pureza, la esperanza y la prosperidad.
- Colocar semillas en el altar: Representan el deseo de abundancia espiritual y material mediante su intercesión.
- Ofrecer flores frescas: Una muestra de devoción y respeto hacia el santo.
- Recitar oraciones: El medio por el cual los fieles se comunican con San Judas, ya sea para pedir su ayuda o agradecer por los favores concedidos.
- Presentar ofrendas de alimentos: Un acto de gratitud, compartiendo las bendiciones recibidas.
San Judas Tadeo es especialmente invocado en tiempos de gran necesidad, lo que lo convierte en un santo profundamente querido y venerado por fieles de todo el mundo.